- Se trataba de 640 metros de línea eléctrica de media tensión que han pasado a ser subterráneos
- De la Uz: “Desde el equipo de Gobierno vamos a seguir trabajando para la eliminación de cables del paisaje de Las Rozas”
Estos días han finalizado los trabajos de soterramiento de la línea eléctrica de media tensión que transcurría entre la calle Clara Campoamor y el polideportivo de Navalcarbón, sobre la zona natural conocida como la Dehesa de Navalcarbón.
Tras las obras de canalización e instalaciones subterráneas necesarias, se ha procedido al desmontaje definitivo de la línea aérea. En concreto se trata de aproximadamente 640 metros de cableado, sustentado por ocho torretas metálicas que también han desparecido ya de este importante espacio natural del municipio.
El objetivo de la intervención ha sido reducir de forma radical el impacto ambiental de la instalación, ubicada en una zona natural, al tiempo que se minimizan los riesgos de la línea expuesta, tanto desde el punto de vista de seguridad frente a incendios como desde el impacto sobre la fauna del entorno natural e incluso para las personas. Además, se ha aprovechado la realización de la nueva canalización para extender fibra óptica que dé servicio a las instalaciones del nuevo Centro del Medio Ambiente de Las Rozas, conocido como “La Talaverona”, ubicado en las inmediaciones del inicio de la línea aérea eliminada.
Soterrado de cables en la ciudad
“Durante los últimos años hemos puesto en marcha iniciativas para el desmontaje de líneas de cableado aéreas en diferentes puntos del municipio que poco a poco van dando sus frutos. A los trabajos de soterrado en la zona de La Marazuela y en Las Matas, que han supuesto el soterramiento de cientos de metros de cables y que continúan en marcha, se une la culminación de este proyecto, que ha eliminado las líneas y las torretas de una de las zonas naturales más emblemáticas de nuestro municipio, la Dehesa de Navalcarbón”, ha declarado el alcalde de Las Rozas, José de la Uz durante la visita al desmontaje de una de las últimas torres.
La primera fase de este ambicioso proyecto supuso la realización de las canalizaciones e instalaciones subterráneas necesarias. Una vez se han obtenido las diferentes autorizaciones necesarias para el desmontaje de la línea eléctrica, se ha afrontado el desmontaje de las torres y sus correspondientes cables. El pasado viernes 29 de diciembre, los trabajadores municipales han culminado la retirada final con el desmontaje de la última torre; y en los próximos días se realizaran los remates finales, consistentes en adecentar las zonas donde estaban situadas la columnas para eliminar su rastro, así como retirar todos los restos del desmontaje.
“El equipo de Gobierno sigue trabajando para eliminar los cables de nuestro paisaje natural y urbano, y esperamos continuar celebrando en breve la desaparición de cables y torres en más zonas de la ciudad”, concluyó De la Uz.